Lily, la bebé elefanta que vino al mundo hace tres meses en el zoológico de Oregon, se ha salvado de la brutal tortura con que se entrenan a los elefantes para circos, películas y similares.
Informa Winston Ross en Daily Beast que la compañía de California Have Trunk Will Travel, que comercia en paquidermos para fines de entretenimiento, tenía un contrato con el zoológico que le daba derecho a esta bebé y a los que pueda traer la cigüeña.
Ello dio pie a una batalla por los derechos de Lily, dice.
Pero el público se enteró de la atrocidad planeada y, al divulgar el contrato, generó una ola indignación que obligó al zoológico a cambiar el contrato.
Lily no tendrá que padecer los vejámenes que se habían acordado entre humanos.
Los elefantes bebés son altamente cotizados ya que son más fáciles de entrenar (rejo y descargas eléctricas) que los mayores.
Lily tuvo suerte: la misma que muchos elefantes no han tenido y siguen siendo víctimas de terribles abusos.
Fotos Michael Durham/Oregon Zoo via Daily Beast