En el pueblo de Willmersback, en Alemania, un hombre de 69 años ha sido acusado de mantener una relación incestuosa con su hija a lo largo de 34 años, siendo él el padre de tres hijos impedidos con ella.
La mujer tuvo un cuarto hijo con el hermano de su padre, su tío.
El abogado del acusado alega que el sexo entre padre e hija fue consensual.
Pero este extraño caso tiene un aspecto aún más alarmante: todo el pueblo lo sabía, escriben Katja Auer y Olaf Przybilla en Süddeutsche Zeitung.
“En la feria local, niños pequeños cantaban en burla sobre niños que era exactamente iguales que su abuelo”.
El mismo alcalde del pueblo comenta sobre el caso.
Dice que durante años corría el rumor, pero con la excepción de un incidente, no había fundamento para hacer nada al respeto.
Jürgen Mönius, alcalde la comuna de Gerhardshofen en la región de Franconia Media, en Bavaria, dice que, además del parecido tan asombroso con el abuelo y la falta de un padre conoocido, hace unos 15 años, “un cazador en el bosque había visto a padre en hija in fragante en un auto”.
No se hizo nada, dice el burgomaestre, por temor a ser acusados de “calumnia”.
La familia recibía asistencia económica del gobierno, dicen.
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