Muchos venezolanos que quisieran de una vez por todas cambiar el régimen de Hugo Chávez, hastiados por los problemas económicos, la criminalidad y la corrupción, temen votar por el candidato de la oposición porque temen perder sus puestos, su vivienda subsidiada o sus beneficios sociales.

Eso afirma William Neuman en un artículo para el New York Times desde Cumaná, Venezuela.

Dice que Hugo Chávez, presidente durante casi 14 años, disfruta de numerosas ventajas sobre Henrique Capriles — desde las emisoras estatales que cubren generosamente el punto de vista oficial y ejércitos de empleados públicos que moviliza para sus concentraciones hasta el presupuesto gubernamental, que usa como si fuera propio.

“Pero un arma especialmente potente en el arsenal del señor Chávez”, dice el New York Times, “es lo que se podría llamar el factor miedo”.

“Muchos venezolanos temen que un simple voto por la oposición podría traer represalias”.

Este temor no es infundado, dice el Times. “Con amargura los venezolanos recuerdan cómo los nombres de millones de votantes se hicieron públicos en el 2004 después de haber firmado el fracasado referendo para obligar el retiro de Chávez”.

Dice que muchos empleados del gobierno que estaban en la lista perdieron sus empleos.

Apunta que en esta elección, más que ninguna otra anterior, Chávez es especialmente vulnerable — aunque reconoce que muchas encuestas dan la delantera al presidente.

Chávez, quien en el 2006 ganó su segundo mandato con 7.3 millones de votos, o 62% del electorado ha anunciado que este año recibirá 10 millones.

Otras encuestas dicen que Capriles viene ganando terreno.

Sin embargo, todos reconocen que esta es la elección más reñida que ha enfrentado Hugo Chávez.

Artículo en inglés