La tormenta solar de la semana pasada que causó leves problemas de comunicaciones radiales y obligó a que algunas aerolíneas civiles optaran por rutas lejos de las regiones polares puede ser el comienzo de un periodo de erupciones solares con fuertes y peligrosas tormentas electromagnéticas.

Según Clive Cookson del Financial Times, el sol está entrando en un nuevo ciclo y científicos que estudian el llamado clima solar advierten sobre “tsunamis solares” con consecuencias similares a las de el huracán en el 2004.

“Una tormenta más extremada puede cerrar por horas los satélites de comunicaciones, incluso causar averías permanentes a sus componentes. En la tierra, la intensidad de las fluctuaciones magnéticas puede ocasionar aumentos repentinos en las líneas de alta tensión, conduciendo a fallos en las redes eléctricas como el que paralizó Quebec en 1989”.

En 1895, una intensa tormenta solar paralizó el recién instalado sistema de telégrafos. Actualmente, con la dependencia de gran parte del planeta en la telefonía móvil y de ésta en la precisión absoluta que da el GPS de los satélites, la misma tormenta sería paralizante, agregó.

Artículo en inglés

Fotos NASA