Esta no la sabía casi nadie: parece que un espía soviético dentro del gobierno del presidente Roosevelt fue instrumental en convencer a los japoneses que atacaran Pearl Harbor el 7 de diciembre de 1941, ataque que marcó la entrada de EUA en la segunda guerra mundial.

Informa John Koster en la revista Time que Harry White, empleado del Departamento del Tesoro, comenzó a filtrar inteligencia estadounidense a los soviéticos durante la década de 1930.

Vitalii Pavlov, su contacto en Rusia estalinista, tuvo una misión clara: forzar la entrada de EUA en la guerra en contra de Japón, lo cual evitaría que la Unión Soviética combatiera una guerra de dos frentes, Alemania en el occidente, Japón en el oriente.

White tenía gran influencia sobre su jefe, el Secretario del Tesoro Henry Morgenthau Jr., el más poderoso miembro del gabinete de Roosevelt.

Dice Time que en un momento Roosevelt evaluó la posibilidad de aliviar el embargo de petróleo sobre el Japón a cambio de una evacuación paulatina de China.

White escribió a Morgenthau un memorando muy fuerte afirmando tal medida sería el equivalente a “vender la China a sus enemigos”, debilitando el prestigio y la influencia de Washington en la región del Pacífico.

En vez, Roosevelt presentó exigencias más fuertes al emperador, quien las interpretó como una amenaza y aprobó el ataque a Pearl Harbord

Dice Time que eventualmente comunistas arrepentidos en EUA delataron a White, quien falleció en 1948.

Pero, según escribiría Pavlov en sus memorias en 1996, White salvó a la Unión Soviética.

Artículo en inglés

Foto: Ataque a Pearl Harbor desde un avión japonés via Wikipedia