Si usted es de los que se esfuerzan por evitar conflictos, piense no más en su salud: una buena peleíta de vez en cuando puede tener efectos positivos, indica un estudio presentado el 12 de agosto en la 118a Convención Anual de la Asociación Psicológica Americana.

Según Raquel Rettner, redactora de LiveScience, “Cuando las personas se encuentran en situaciones tensas con sus cónyuges, hijos, o jefe, el evitar el conflicto puede ser lesivo para la salud”. Al día siguiente del argumento podrían exhibir una serie de síntomas que incluyen molestias, mal genio, naúsea y dolores.

Participaron en el estudio 1,842 adultos de entre 33 y 84 años.

Investigaciones anteriores habían demostrado que las parejas casadas que evitan discusiones son más propensas a morir antes que las que se enfrentan, agrega. Además, otro estudio encontró que expresar la ira ayuda a generar una sensación de control y optimismo ausente entre las personas que responden con temor .

El abstenerse de argumentos también se vinculó con patrón inusual de cortisol (la hormona del estrés) en la mañana. Normalmente, al despertar una persona experimenta niveles de cortisol más elevados, y la hormona del estrés va disminuyendo durante el día.

Señala que aquellas personas que argumentaban tenían un aumento más lento en sus niveles matutinos de cortisol. Esto puede ser porque la gente que tiene muchos argumentos y estrés crónico en sus relaciones reaccionan menos a la tensión a través del tiempo. “Esencialmente una bomba lista para explotar en vez de una cuyo poder fue desactivado de una manera más gradual”.

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