Arde Dier de Newser publica nota sobre cómo el gobierno de EUA, a través de la agencia USAID, fundó, financió y mantuvo por 4 años una red social con el objetivo explícito de desestabilizar el régimen cubano.
Dice que, una investigación por Desmond Butler, Jack Gillum y Alberto Arce de la Associated Press documenta la creación de un “Twitter cubano”, plataforma de mensajería por texto llamada “ZunZuneo” — que es el ruido de un colibrí en el hablar popular cubano — la cual operó entre el 2009 y 2012 hasta que se agotaron los fondos.
Dice que durante este tiempo, logró inscribir 40,000 usuario, “que no eran conscientes de que estaban usando un programa financiado y creado – quizá de manera ilegal, a menos que el presidente lo hubiera autorizado y el Congreso hubera sido notificado al respecto” por la Agencia de EE.UU. para el Desarrollo Internacional.
Agrega que la agencia guardó los datos personales de los usuarios.
El objetivo, dice el informe, era “dar un impulso para el arranque del proceso de transición hacia el cambio democrático” .
Como mínimo, el proyecto contradice las afirmaciones de la USAID que no lleva a cabo operaciones secretas, y su reputación entre los gobiernos extranjeros, a los que se presta asistencia, podría sufrir como consecuencia.
Señala una nota de los creadores que “Para asesgurar el éxito de la misión […] no habrá absolutamente ninguna mención de la participación del gobierno de EUA”.
Se calcula se gastaron que US$1.6 millones, aunque los documentos públicos “mostraron que el dinero se reservó para un proyecto en Pakistán”, agrega el informe de la AP.
Para camuflar aún más el proyecto, los creadores establecieron una sociedad anónima en España y una empresa que opera en las Islas Caimán para pagar las cuentas de la empresa con el fin de que el “el dinero no se pueda rastrear a EUA”, dice.
Además, los mensajes de los usuarios nunca tocaron servidores basados en Estados Unidos. El informe completo explica cómo el proyecto se inició con la adquisición de medio millón de números de teléfonos celulares de Cuba.
Informe de la Associated Press (inglés)