El Presidente de EUA Barack Obama ha venido alterando el tono de su retórica y es el momento de que le ponga un poquito más pasión e ira, dice el columnista afroamericano John McWorther.
Escribe en The Root que las capacidades oratorias de Obama, “la habilidad con que nos enamoramos de él ya no tienen gran uso”.
Al enfrentar movimientos como el Tea Party, “un contingente con el corazón vacío y carente de intelectualidad”, significa que es necesario un cambio de estilo y substancia.
“Para el presidente, ha llegado la hora de combatir el fuego con fuego, y gran parte de ello se puede lograr con una nueva manera de hablar. Obama tiene que seguir el ejemplo de la forma que incluso los políticos de más alto nivel se comunican en los debates del Parlamento en el Reino Unido: un estilo combativo, que aproxima el abucheo en que las palabras y la fraseología se esgrimen como armas”.
The Root usa como ejemplo en EUA el discurso de Franklin D. Roosevelt durante la campaña de 1936, cuando acosado y vilpendiado por la oposición republicana, usó la frase, “Doy la bienvenida a su odio”.
Compara la situación de ambos presidentes y dice que Obama no debería vacilar en usar palabras como “engaño” e “indignación” al referirse a la oposición.
El cielo no se va a caer encima, dice. “Después de todo, está furioso (presumo) y usted es también negro. Este es el momento en que el país podría usar a un Negro Furioso”.