La familia de Israel Hernandez-Llach ha entablado una demanda el martes contra la ciudad de Miami Beach, por la muerte del joven artista de graffiti de 18 años a manos de agentes de la policía.
Según informa Nick Madigan en The New York Times los agentes descargaron repetidas veces una pistola eléctrica causando la muerte de Hernández-Llach.
La demanda alega que se empleó “fuerza innecesaria, excesiva e inconstitucional”.
Dice que la policía “no tenía fundamento suficiente para temer por su propia seguridad o la seguridad de los ciudadanos” durante el altercado.
Un testigo dijo que los policías reían y se daban señales de “High-Five” mientras que el adolescente estaba inmovilizado en el suelo.