Como parte de la colaboración entre las FARC y el gobierno de Venezuela, funcionarios venezolanos pidieron a los insurgentes colombianos que asesinaran a sus opositores políticos, dice un libro publicado por el International Institute for Strategic Studies.
Según Simon Romero en el New York Times, esta información y otros datos que documentan la relación por años entre las FARC colombianas y el gobierno de Chávez son parte del libro “The FARC Files: Venezuela, Ecuador and the Secret Archive of Raúl Reyes“, volumen de 240 páginas basado en los computadores y discos externos de Raúl Reyes, comandante de la organización y muerto en un ataque de la aviación colombiana al campamento de guerrilleros colombianos en Ecuador en el 2008.
Dice que algunos de estos documentos — cuya autenticidad inicialmente se cuestionó pero desde entonces ha sido validada por diversos organismos– han sido usados como referencia previamente. Pero esta será la primera vez se hacen públicos en un volumen tal.
Agrega el Times que el mes pasado Chávez admitió por primera vez que aliados políticos suyos habían colaborado con los rebeldes colombianos pero insistió en que “fue a espaldas nuestras”. Dice también que los documentos no “presentan evidencia de que el presidente Hugo Chávez estuviera al tanto de los pedidos de asesinato ni que se hubieran llevado a cabo”.
Apunta que el archivo describe una reunión secreta en septiembre del 2000 entre Chávez y Reyes, donde el mandatario venezolano accedió prestar a FARC dinero en efectivo para la compra de armamento.
Señala que el libro se publica en un momento “delicado” en las relaciones de las FARC con el gobierno de Venezuela.uLas relaciones de Chavez con la insurgencia colombiana parecen haberse enfriado recientemente con un acercamiento al nuevo gobierno de Juan Manuel Santos. Muestra de ello, dice, fue el arresto y deportación en abril de Joaquín Pérez, presunto miembro de FARC.