En una cruel vuelta del destino, un asesino que está cumpliendo una condena de 25 años, acaba de heredar la fortuna de su víctima, informa el New York Post.

Dice el diario que Brandon Palladino, de 24 años de edad y adicto a la heroína, al salir de la cárcel recibirá cientos de miles de dólares que dejó su suegra, a quien el asesinó luego de que lo encontrara robándole sus joyas. Palladino se declaró culpable del asesinato y logró un acuerdo con la fiscalía para recibir una sentencia de 25 años.

La hija de la difunta, quien estaba casada con Pallatino, heredó toda la fortuna de su madre. A su muerte de una sobredosis, dejó todo a su marido. Aunque la hija nunca fue acusada de nada, según la hermana de la difunta ella participó en el crimen y se suicidó de remordimiento.

Al salir de la cárcel, Pallatino podría recibir casi medio millón de dólares.

Este parece ser un caso en que el crimen pagó.

Artículo en inglés