Un masivo impulso de cabildeo por parte de una coalición de republicanos se desplegará la semana entrante ala capital de EUA para presionar a miembros republicanos de la Cámara de Representantes a que pasen cuanto antes una ley comprensiva de reforma migratoria tiene el potencial de dividir nuevamente al partido, cuyas fisuras salieron a relucir solo hace semanas en torno al cierre del gobierno y la oposición al plan de salud Obamacare.
Según informan Eric Lipton y Ashley Parker en el New York Times este esfuerzo de cabildeo incluye unos 600 líderes conservadores empresariales, agrícolas y religiosos que se “enfocarán en 80 representantes de 40 estados — todos republicanos”.
Participantes en este esfuerzo, agrega el Times, han dicho que van a suspender (o están considerando hacerlo) el apoyo financiero para las elecciones del 2014 a los legisladores republicanos que ellos consideren están obstruyendo el progreso sobre la inmigración.
La tensión dentro del partido que se hizo evidente en el enfrentamiento que cerró al gobierno podría resurgir en la lucha sobre inmigración, aunque la alineación puede no ser exactamente igual.
Dice el Times que una corriente del partido republicano no ve ninguna ventaja política en apoyar una reforma migratoria en estos momentos y por ello preferirían esperar hasta el 2015 después de que hayan pasado las elecciones congresionales.
Esto precisamente es lo que buscan cambiar los que han iniciado este proyecto.
