Un juez de Nueva Jersey el jueves dijo que existe causa probable para que los fiscales investiguen al gobernador Chris Christie por mala conducta oficial en relación a su papel en el escándalo conocido como “Bridgegate”, en el que se cerraron varios carriles en el puente George Washington, que desde New Jersey da acceso a Manhattan.
Entre septiembre 9 y el 13 de 2013, varios carriles permanecieron cerrados varios días creando un caos total en el tráfico.
El juez ahora entregará el caso a la Oficina del Fiscal del Condado de Bergen, donde las autoridades determinarán a partir si el caso conduce a una acusación. Las oficinas de Christie han dicho que apelarán el fallo inmediatamente.
“Esta es una queja deshonrosa presentada por un conocido demandante en serie y activista político y con una historia de abusar del sistema judicial”, dijo la oficina de Christie en un comunicado. “El simple hecho es que el gobernador no tenía conocimiento de los reajustes de carriles ya sea antes de que ocurrieran o mientras estaban sucediendo. Esta cuestión ya ha sido investigado a fondo por tres investigaciones separadas e independientes”.
Bridget Kelly y Bill Baroni, antiguos asesores del gobernador, han sido imputados por causar los cierres de carriles para vengarse del alcalde de Fort Lee, en el lado de New Jersey del puente, por el que circulan hasta 11,000 vehículos por hora. El juicio sigue.
El escándalo del puente básicamente destruyó las ambiciones presidenciales de Chris Christie, que se perfilaba como uno de los “presidenciables” del partido republicano EUA. Aunque se presentó en 2015 junto a más de una docena de otros candidatos, fue uno de los primeros en retirarse.
Desde entonces ha sido un sólido partidario de Donald Trump.
