La eurozona en peligro mortal, ElMolinoonline.comLa realidad europea se apartó terriblemente del guión y ahora nadie sabe qué hacer, escribe Ezra Klein en su blog del Washington Post.

Dice que según los expertos la crisis de la deuda europea afectaría primero Grecia, luego Portugal, Irlanda y, en el peor de los casos, España.

Pero nunca, jamás Italia. Y, ahora con el vórtice en que ha caído la economía de esa nación, podría perfilarse el fin de la eurozona, apunta.

Todo ha caído estrepitosamente: el Indice Dow Jones (2 por ciento), Stoxx 50, el euro.

Los costos de rendimientos de los bonos alcanzaron en Italia el 7 por ciento, que es el mismo nivel que disparó la crisis en otras economías.

Italia, dice, es demasiado grande para fallar e igualmente grande para que la salven. Es la octava economía del mundo con US$2,000,000,000,000 — casi siete veces el tamaño de Grecia.

La banca francesa y alemana tienen US$600 mil millones en peligro en esa nación.

Si salvar Grecia fue difícil, pregunta, ¿quién va a tener la voluntad y, además, de donde saldrá el capital para sacar de apuros a Italia?

La salida de Silvio Berlusconi, realmente no tiene ningún efecto: “Cambiar de gobierno no altera la aritmética”, dice.

El problema, agrega, es que si no se puede salvar a Italia, por qué molestarse en salvar a Grecia.

Si se ve que el euro no aguanta, ¿por qué habrían los políticos griegos de implementar las medidas de austeridad ampliamente rechazadas en Grecia?

Y los políticos alemanes, ¿por qué tomarían ellos medidas poco populares para socorrer algo que muchos no creen posible o simplemente no desean salvar?

La única manera de detener el pánico, dice, es que el Banco Central Europeo desembolse. “Para ello, se debe prometer un respaldo de liquidez ilimitada a los mercados de bonos soberanos de las naciones solventes”.

Sin embargo, Mario Draghi, director general del BCE, dice que ese no es el papel de su banco. “La misión del BCE es estabilidad de precios a mediano plazo”.

El mundo se está acabando.

Artículo en inglés