Adam Weinstein publica un extenso artículo en Gawker donde explica la crisis en Irak. Reproducimos apartes.
Insurgentes sunitas radicales agrupados bajo el nombre de “Estado Islámico de Irak y Siria”, tomaron control el martes de Mosul, la ciudad más grande en el norte de Irak, y han ocupado rápidamente varias otras ciudades claves ricas en petróleo como Baiji y Tikrit, de donde surgió el difunto dictador Saddam Hussein.
Rebeldes ISIS también han atacado varias otras ciudades en el oeste de Irak, consolidando su poder en las zonas donde los musulmanes sunitas son predominantes.
La situación es muy seria, como señala este mapa de New York Times de las batallas que muestra que los insurgentes se están acercando a Bagdad, la capital:
En los días que siguieron la invasión de Iraq por EUA y el auge de insurgencia anti estadounidense, Al Qaeda en Irak formó un núcleo de combatientes religiosos que juraron lealtad a la organización de Osama bin Laden.
Durante el curso de los años, se unieron a otros grupos de extremistas que compartían la visión teológica y en el 2006 intentaron establecer el estado islamista de Irak en el oeste del país, que es mayoría sunita.
EUA con el gobierno de Irak rechazaron los avances islamista, con frecuencia formando alianzas con dirigentes sunitas más moderados. Pero la retirada de EUA, y la creciente guerra civil en el vecino país de Siria, animó a los yihadistas restantes, que se han reconstituído en el Estado Islámico de Irak y el Levante (como también se conoce a Siria): ISIL o ISIS.
Algunas de las normas impuestas en la población civil.
Para las mujeres, vestirse decentemente y llevar ropa ancha. Sólo salir si es necesario.
Nuestra posición sobre santuarios y tumbas es clara. Todo será básicamente destruido.
No se permitirán drogas, alcohol ni cigarrillos .
Advertimos a los líderes tribales y jeques que trabajar con el gobierno es un acto traidor.
Pedimos a todos los musulmanes llevar a cabo las oraciones al mismo tiempo en las mezquitas.
El dinero que tomamos de gobierno Safavid ahora es público. Sólo un Imam de los musulmanes puede gastarlo. Cualquiera que roba perderá la mano.
Para los que preguntan ¿quiénes sois? Somos soldados del Islam y hemos asumido nuestra responsabilidad de traer de vuelta la gloria del califato islámico.
La soluciones seculares (República, del partido Baath, Safavid) que se intentaron han causado dolor. Este es el momento para el estado islámico Imam Abu Bakr El Qurashi.
La facilidad con que los yihasdistas están avanzando se debe en parte a que los sunitas de Irak no han resistido demasiado. Están permitiendo que los yihadistas se apoderen, no porque quieran un estado islámico, sino porque consideran que recibirán mejor tratamiento que el que les ha dado el gobierno de Irak.
Nouri al-Maliki, primer ministro de Irak durante mucho tiempo, encabeza una coalición de musulmanes chiítas que tienen relaciones amistosas con sus correligionarios iraníes con los que comparte una profunda desconfianza hacia la minoría sunita del país, que disfrutó el poder y persiguió a los chiítas durante el antiguo régimen de Saddam.
Bajo estas condiciones, muchos sunitas en Iraq han optado por dejar que los yihadistas expulsen las fuerzas chiítas de Bagdad de su territorio. ISIS ha dejado claro que cualquier resistencia enfrentará la muerte, impúnemente así no hay casi incentivos para unirse a los esfuerzos de la resistencia del gobierno.
Además, la policía y el ejército de Irak en las áreas más golpeadas han sido derrotadas o han desertado.
Las tropas han dejado tras de sí armamento, vehículos, incluso sus uniformes, a medida que los militantes se apoderaron de por lo menos cinco cuarteles y el aeropuerto.
Los funcionarios estadounidenses que habían dicho que los US$14 mil millones que EUA había gastado en las fuerzas de seguridad de Irak las prepararía para defender el país una vez se retirara EUA, ahora tienen que examinar imágenes de militantes en una parada en Mosul en los vehículos capturados.
Video de 4,500 soldados capturados.
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El Presidente Obama puede aceptar el cansancio de EUA con las guerras y dejar que los iraquíes, iraníes y kurdos, que viven en la provincia norte del país, se ocupen del problema. Un resultado muy probable de esto sería la división de Irak en múltiples estados, de los cuales uno está controlado por Islamistas radicales; la caída del país en su totalidad con sus recursos militares y naturales controlados por ISIS; o la destrucción de ISIS por una coalición encabezada por Irán, dejando a Irán como el principal poder en la región. Cualquiera de estas situaciones probablemente agravará el desastre humanitarios que ya se nota, con una explosión de muertes y refugiados.
Una intervención de EUA con bombardeos crearía nuevamente divisiones internas, con un compromiso abierta sin plan de salida, como sucedió en Libia.
