4501470765_0511561923_zLas primeras cinco veces que Rose Ann Davidson, de San Marcos, Texas, fue arrestada por conducir ebria, se las arregló para evitar largas penas de prisión.

Pero ahora con la sexta vez, han decidido meteral presa y tirar la llave.

Literalmente.

Informa Jeremy Schwartz en Austin American-Statesman que un jurado consideró que la mujer de 44 años merece la prisión perpetua.

Y a eso mismo la condenaron.

Entre 1996 y el verano del año pasado fue detenida seis veces por manejar borracha.

 

Artículo en inglés

Foto cortesía Cosima’s Digital Designs via flickr