Ese zumbido molesto (por no decir enloquecedor) que acompaña cada transmición del mundial seguirá hasta la final. La FIFA ha afirmado que esas cornetas en diversos tamaños y colores llamadas vuvuzelas forman parte de la cultura futbolística de la nación anfitriona del mundial. Y han descartado toda idea de callarlas.

Dice Daily Beast, “Las vuvuzelas han llegado a ser un juguete bastante controversial de los aficionados, no solo para jugadores y entrenadores que las detestan, sino además entre los organizadores del Mundial”.

Indica que en un momento Danny Jordaan del Comité Organizador del Mundial consideró prohibirlas. Pero se han retractado y las vuvuzelas se quedan.

Parece que son más que una simple molestia. “Jugadores y entrenadores han tenido que optar por comunicarse visualmente y por señas para compensar la manera en que las vuvuzelas limitan su capacidad de escuchar”.

Artículo en inglés

Foto dundasfc via flickr