WhiskeyUna lección que le costó la vida. La madre y el padrastro de Kendall Ball dicen que intentaron enseñarle a su hijo una lección sobre el alcohol pero terminaron matándolo.

Ahora enfrentan cargos criminales en Lyman, Wyoming. Podrían pasar los próximos 20 años en cana.

El joven de 16 años murió intoxicado con niveles de alcohol en su sangre más de siete veces el límite para un adulto.

Según dijo la madre a los investigadores, le dieron varios tragos de whiskey Fireball y de Jack Daniels.

Los padres dicen que querían que “se enfermara” porque había dicho que quería beber. Ellos temían que se convirtiera en un alcohólico como el padre biológico.

Via Newser