“Hace algunos años, mi sueño secreto era llegar a trabajar en Wall Street”, dice Lauren Silverman en Youth Radio. “Me imaginaba con mi traje de negocios a rayas en las a toda prisa pasando por la estatua del toro atacando antes de que abriera la bolsa.”

Pero luego vino la crisis económica. “Y cambié de parecer sobre Wall Street muy rápido. Recuerdo con otros muchachos cuando escuchamos sobre la ayuda del gobierno y el fiasco de los bonos y le gritábamos al televisor. Estábamos furiosos. Parecía que las compañías tiraban el dinero como si fueran aviones de papel. Y los empleados seguían recibiendo sus salarios por perder. Y nos les importaba los riesgos que tomaban.

Agrega que aunque el sector finanzas haya pagado al gobierno el dinero con que los rescataron, ha quedado sobre Wall Street una mancha indeleble. “Por ello ni mis amigos ni yo volveremos a soñar con trabajar allí”.

Artículo en inglés