file000398613366Con 52 primaveras a cuestas, Caroline D. quiso tomar un examen escolar clave por su hija Laetitia de 19 en un colegio privado de París.

La cacharon.

Ahora, en vez de celebrar con champagne la graduación de Laetitia con el cotizado Baccalauréat, Caroline D. enfrenta cargos de fraude.

Dice Benoît Hausse en Le Parisien que Caroline D. — vistiendo zapatos tenis, pantalones jeans de corte bajo y mucho maquillaje — entró al salón de la escuela Bossuet-Nôtre Dame en el 9 arrondissement y comenzó a trabajar las respuestas para la sección de inglés del examen.

Tuvo la mala suerte de ser identificada por uno de los monitores del examen quien llamó a la policía.

Sin embargo, a fin de no causar distracciones entre la veintena de estudiantes concentrados, dejaron a la presunta impostora seguir respondiendo durante dos horas.

 

Eventualmente, las autoridades le pidieron discretamente que se retirara del salón, donde la esperaban los gendarmes.

Reconoció que estaba tomando el examen por su hija y ahora tiene que pagar los platos rotos.

Pero la más perjudicada, sostiene el diario parisino, es Laetitia, quien posiblemente tenga que esperar cinco años para volverse a presentar como aspirante al bac.

Esperamos que le dará suficiente tiempo para mejorar su inglés.

Artículo en francés.