“Escuchar que había muerto fue para mi devastador”, dijo a Diane Sawyer de la cadena ABC News Mark Kelly, marido de la congresista baleada en el tiroteo en Tucson.

Kelly, astronauta de profesión, se encontraba en el avión de un amigo suyo yendo con su familia al lado de Gabrielle Giffords cuando escuchó los reportes inciales del tiroteo que anunciaron la muerte de la congresista.

“Los niños, Claudia y Claire comenzaron a llorar. Mi madre, creo que ella también. Se que entró al baño y se desmoronó”.

Dice el astronauta que la congresista temía sufrir un atentado.

Al poco rato, se anunciaba que la congresista seguía viva. Luego, comenzaron a llegar buenas nuevas (milagros dirían unos), saliendo ella de peligro y comenzando un proceso de recuperación que podría ponerla en rehabilitación en cuestión de semanas.

Foto pantallazo ABC News

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