La antítesis de lo sexi, llegando al punto de ser desagradable, por no decir asqueroso. Aún así no deja de cautivarnos la noticia en TMZ de que en la Florida se subastará un par de pantis que la soberana británica dejó en Chile hace 40 años.

Las pantaletas estaban en la posesión de un playboy de Miami, el “Baron” Joseph de Bicske Dobronyi, conocido como Sepy. Dice la publicación que la reina los había olvidado en un avión privado cuando visitó Chile en 1968.

Sepy murió en junio de este año y ahora sus heredores piensan rematar sus posesiones. Utilizarán la misma casa de subastas que vendió en el 2008 los calzones de otra reina, Victoria (nada que ver con Victoria’s Secret), por US$9,000. Se espera que este segundo par de bragas reales se venda por una cantidad similar.

No vamos a preguntar quién compraría eso, porque hay de todo en este mundo. Pero si nos deja algo perplejos: ¿bajo que circunstancias olvidó la soberana algo tan íntimo (y poco sexi) en un avión?

Artículo en inglés

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