Interestante nota por en el Washington Post sobre la situación económica de la mayoría de las personas detenidas durante la insurrección del 6 de enero en Washington D.C.
Apartes.
“Casi el 60 por ciento de las personas que enfrentan cargos relacionados con los disturbios del Capitolio habían sufrido problemas económicos, incluidas quiebras, avisos de desalojo o ejecución hipotecaria, deudas incobrables o impuestos impagos en las últimas dos décadas, según un análisis de registros públicos del Washington Post para 125 acusados con información suficiente para detallar sus antecedentes financieros.
“La tasa de quiebras del grupo (18 por ciento) es casi el doble que la del público estadounidense, encontró The Post. Una cuarta parte de ellos habían sido demandados por dinero adeudado a un acreedor. Y 1 de cada 5 de ellos se enfrentó la pérdida de su hogar en algún momento, según documentos judiciales.
“Los problemas financieros son reveladores porque ofrecen pistas potenciales para comprender por qué tantos partidarios de Trump, muchos con carreras profesionales y pocos con antecedentes penales violentos, estaban dispuestos a participar en un ataque incitado por la retórica del presidente que lo describe a él y a sus partidarios como víctimas indignas. .
“Si bien ningún factor explica por qué alguien decidió unirse, dicen los expertos, Donald Trump y su tipo de política de agravios aprovecharon algo que resonó en los cientos de personas que llegaron al Capitolio en un histórico estallido de violencia.
“‘Creo que lo que se está encontrando es algo más que inseguridad económica, sino un profundo sentimiento de precariedad sobre la situación personal”, dijo Cynthia Miller-Idriss, profesora de ciencias políticas que ayuda a dirigir el Laboratorio de Innovación de Investigación de Polarización y Extremismo en American University, reaccionando a los hallazgos de The Post. “
Y esa precariedad, combinada con una sensación de traición o ira porque alguien le está quitando algo, movilizó a mucha gente ese día”.
