El simple hecho de tener una relación con el periodista Glenn Greenwald mereció al brasileño David Miranda una detención durante nueve horas de intensa interrogación por las autoridades británicas en el aeropuerto de Heathrow.
Aunque Miranda no haya nada que ver con las revelaciones de Greenwald en The Guardian sobre la vigilancia masiva por la NSA, fue detenido bajo la Ley de Terrorismo, que permite a las autoridades detener e interrogar personas en los aeropuertos, y le fueron confiscados sus artículos personales.
Jonathan Watts publica en The Guardian la primera entrevista con Miranda.
Miranda dijo que le intimidaron para obligarle a revelar las contraseñas de su computadora y el teléfono móvil.
“Me amenazaban todo el tiempo, diciendo que me meterían preso si no cooperaba”, dijo.
Dijo, no se le permitió llamar a su compañero, que es un abogado en EUA.
Tampoco tuvo un intérprete.
“Yo estaba en un país diferente, con diferentes leyes, en una habitación con siete agentes que iban y venían, y no paraban de hacerme preguntas. Pensé que cualquier cosa podría suceder. Pensé que podría ser detenido durante un tiempo largo”, dijo.
Miranda fue capturado casi tan pronto aterrizó su vuelo de British Airways en la mañana del domingo. “Hubo un anuncio en el avión que todo el mundo tenía que mostrar pasaportes. El momento en que me bajé del avión me llevaron a una pequeña habitación de madera con cuatro sillas y una máquina para la toma de huellas dactilares”.
Requisaron su equipaje de mano y la policía confiscó una computadora, dos pen drives, un disco duro externo y otros artículos electrónicos, como una consola de juegos, además de dos relojes recién comprados y los teléfonos que fueron empacados en cajas y en su equipaje guardado.
“Está claro por qué me llevaron. Es porque soy el compañero de Glenn. Porque me fui a Berlín. Porque Laura vive allí. Así que creen que tengo una gran relación. Pero yo no juego un papel. No miro los documentos. Ni siquiera sé si lo que llevé fueron documentos. Pudo haber sido para la película que Laura está trabajando.”
Detenido bajo la Ley Antiterrorista, Miranda nunca fue acusado de ser terrorista ni tener relación con terroristas
El gobierno de Brasil ha llamado la detención “injustificada”.
“Sentí el peso de mis hombros levantarse tan pronto regresé. En Brasil me siento muy seguro, muy seguro”, dijo. “Yo sabía que mi país me protegería, y creo en mi marido y sabía que él haría cualquier cosa para ayudarme.”
Foto via The Guardian
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