Foto: Primera Dama EMax Read, de la página Gawker denunció la presencia de la primera dama de EUA en la entrega de premios como una colaboración con la CIA, llamándola algo de “mal gusto”, preguntando qué pasaría si Lyudmila Putin presentara un premio similar a una película sobre una operación rusa en Georgia y diciendo que ello presenta a la industria cinematográfica de EUA como una extensión del “poder imperial”.

Escribe: “Michelle Obama, la Primera Dama de EUA, se presentó en vivo vía satélite en los Premios de la Academia el domingo por la noche para anunciar que Argo, la película de Ben Affleck sobre la CIA en Irán, había ganado el Oscar a la Mejor Película”.

La cinta, agrega Gawker, celebra “el éxito de la colaboración entre la industria cinematográfica de EUA y su industria de la inteligencia”.

Sería bueno que decir que su aparición al final del extravagante y aparentemente interminable espectáculo fue el acto de peor gusto anoche (imaginen a Lyudmila Putin declarando como “mejor película”, una versión ficticia de una operación del SVR en Georgia), pero entonces, Seth MacFarlane creador de Family Guy fue el anfitrión, lo que significaba tres horas de empalagosos, egoístas y tristes chistes sexistas y contra los homosexuales, marcada por una prolongada e inexplicable ;celebración’ de los tres musicales de la última década.

Realmente la cosa más vergonzosa acerca de la apariencia de la primera dama es que reconoce la industria musical de EUA “como una extensión del poder imperial estadounidense”, dice en su nota de hoy en Gawker Max Read.

Artículo en inglés