La manera tradicional de definir el cáncer por el órgano en que se origina es anticuada y nuevos descubrimientos científicos sugieren que debe verse en vez en términos de mutaciones genéticas, escribe Gina Kolata en el New York Times.
Esta nueva y revolucionara perspectiva es resultado de dos nuevos estudios que se publicaron , dice, uno sobre el cáncer del endometrio del útero y otro de la leucemia mieloide aguda que publica simultáneamente The New England Journal of Medicine son parte de un estudio más amplio sobre las aberraciones en el ADN del cáncer.
Para sorpresa de investigadores, se ha descubierto que los peores tumores de endometrio del útero tienen grandes similitudes con las peores formas de cáncer de mama y de ovario, dice.
Eso plantea “la tentadora posibilidad de que los tres cánceres mortales podrían responder a las mismas drogas”, agrega.
“Es una exploración del panorama genómico del cáncer”, comentó el doctor David P. Steensma, investigador leucemia en el Instituto del Cáncer Dana-Farber, quien no participó en los estudios. “Muchos de los avances en medicina han sido acerca de tratamientos o pruebas que sólo son útiles para un determinado período de tiempo, hasta que surja algo mejor. Pero esto es algo que seguirá siendo útil dentro de 200 años. Es un hito que resistirá la prueba del tiempo”.
