Una fábrica en China vinculada a la línea de ropa de Ivanka Trump se encuentra en los titulares de hoy luego de que se supiera que los trabajadores reciben poco más de US$62 semanales por 60 horas laborales, informó el Washington Post el martes.
Las deplorables condiciones de explotación han salido a luz pública luego de una auditoría de la fábrica, cuyo nombre no se ha divulgado, que fue realizada por la Asociación de Trabajo Justo de Washington en octubre y que fue publicada el lunes.
Los auditores encontraron dos docenas de violaciones a las normas internacionales del trabajo durante su visita de dos días a la fábrica.
Muchos trabajadores sólo tenían derecho a cinco días de licencia al año, según el informe, y se les obligaba a trabajar 57 horas a la semana “de manera regular”. La fábrica también fue citada por numerosas violaciones referentes a la seguridad laboral.
Ochenta empleados de la fábrica confeccionan prendas de vestir para G-III Apparel Group, la compañía que tiene derechos exclusivos a la marca de Trump. La compañía también produce ropa para Calvin Klein y Tommy Hilfiger.
No quedó claro si la fábrica estaba produciendo materialaes para la línea de Ivanka Trump en el momento de la inspección. NI Trump ni su compañía G-III han comentado sobre el informe. Aunque Trump no desempeña un cargo en la gestión de G-III, es probable que el informe plantee preguntas sobre su compromiso de empoderar a las mujeres en los centros laborales, un tema al cual dice dedicarse.
Actualmente, Ivanka Trump es una asesora en la administración de su padre. El informe también cuestiona la política de Trump de “comprar producido en EUA y contratar a estadounidenses”, ya que la fabricación de sus vestidos que se venden por US$158 y US$79 ha sido subcontratada a trabajadores fuera de EUA que reciben bajos salarios.