El continuo desangre en las encuestas, no solo nacionales sino también en estados claves, viene acompañado de cambios drásticos en la campaña por la reelección de Trump, que hasta el momento no logra controlar los acontecimientos.

Y con ello se desvanecen cada día más las posibilidades de la reelección de Donal J. Trump, 45avo presidente de EUA, quien por la gracia del colegio electoral alcanzó llegó a La Casa Blanca con un déficit de casi 3 millones de votos menos que su adversario. 

En días recientes, hemos visto a Trump recular como no había hecho nunca antes. 

Canceló la convención del partido republicano, que él quería fuera un evento multitudinario como eran sus mítines de campaña, que también son cosa del pasado.

Está realizando nuevamente sus conferencias de prensa sobre Coronavirus. Carecen de la ayuda de expertos, y su desordenada mente lo lleva a hablar en círculos, contradiciendo.

Luego de despotricar contra el uso de mascarillas, ahora dice que a lo mejor convenga usarlas. (Muy pocas fotos).

Incluso su controversial cabellera (o peluquín) ha perdido ese color naranja intenso; ahora es algo más plateada. 

Todo esto es labor del nuevo director de la campaña, Bill Stepien, quien reemplazó a Brad Parscale después del fiasco en Tulsa a finales de junio. 

Pero esto no ha logrado parar el desangre. Señala Axios:

El Cook Political Report cambió su pronóstico de Florida de “toss-up” (cualquier resultado posible) a “leans Democratic”, inclina hacia los demócratas. La editora nacional dice que el el Coronovirus es la principal causa

Una encuesta de Quinnipiac poll el jueves le dio a Joe Biden 13 puntos de ventaja en ese mismo estado. (Contexto: para la misma época en 2016, Trump le llevaba 3 puntos de ventaja a Hillary Clinton).  

Charlie Cook y su equipo aumentan las probabilidades de que los demócratas recuperen el Senado. Curules en los estados de Arizona, Georgia, y Iowa podrían cambiar de manos.

El lodazal en que está atascado. La tasa neta de aprobación de Trump sigue siendo casi la misma desde que obtuvo la presidencia (-15), lo cual subraya las dificultades que ha tenido con la opinión pública.

  • Harry Enten de CNN señala que desde 1940, los presidentes que lograron la reelección tenían una aprobación neta de +23.
  • Los que perdieron, tenían una aprobación neta de -15.

El partido demócrata de EUA, hasta hace poco la otra cara de la moneda caduca del sistema, está adquiriendo un carácter progresista, eligiendo nuevas y frescos camada de activistas. El apoyo de la carismática líder Alendria Ocasio-Cortez AOC, discípula de Bernie Sanders, ha sido clave en este proceso.

Más razones para preocuparse. Trump, su equipo y su órgano de propaganda siguen impulsando un discurso racista, en contra del movimiento Black Lives Matter, en defensa de la simbología del lado esclavista durante la guerra civil. La abrumadora mayoría del país rechaza esta visión de EUA — hasta el punto que muchos estadios tienen murales de Black Lives Matter, y los deportistas le rinden homenaje a las víctimas del racismo.

Manifestaciones siguen teniendo lugar en diversas ciudades del país. En Portland, Oregon, el gobierno ha enviado agentes federales sin identificación. Los gases lacrimógenos, las balas de goma, las macanas, arrestos no han logrado parar las protestas, que en vez han adquirido más fuerza y formas más creativas de movilización.

Estas incluyen “Muros de Madres”, “Muros de Padres”, “Muros de veteranos”.

Otra razón. Trump puede haber cambiado sobre el uso de máscaras, pero quedan los millones de infectados, más de 140 mil fallecidos, cifra que aumentar drásticamente en los 100 días que faltan para la elección.

Todavía no hay planes concretos — fuera de órdenes y amenazas — de cómo se van a abrir las escuelas en agosto y septiembre.

La publicidad de un grupo de ex republicanos llamados el Lincoln Project ha vuelta a Donald Trump en el hazmerreír del país — especialmente sus intentos por comprobar que no sufre del trastorno de Alzheimer.

Por más que trate de culpar a otros por el descalabro que ha causado la pandemia, es imposible evitar el dolor humano que ha afligido al país, durante el mandato de Donald J. Trump.

Noticias muy alentadoras. Sin embargo, ninguno de estos activistas bajan la guardia — las actividades siguen.