Mexico indignadoUna crisis política, moral e institucional ha desencadenado en México la brutal ejecución de 43 estudiantes que tuvo al país a la expectativa desde el 26 de septiembre.

Con movilizaciones comparables en tamaño y frecuencia a las de 1968, el país ha respondido a la confirmación por parte de la procuraduría general de que los normalistas de Ayotzinapa había sido ejecutados, luego quemados en un basural durante más de 24 horas.

Responsabilidad por la atrocidad la atribuyen a la policía municipal, que obró bajo órdenes del alcalde de Iguala, con patrocinio del crimen organizado y con una respuesta tardía por parte del gobierno durante los primeros días, que muchos consideran es parte de la incapacidad del gobierno actual de hacer frente a la violencia en México.

Informa el portal La Silla Rota que manifestantes han quemado las puertas del Palacio Presidencial, gritando “Fue el estado”.

Entre las consignas que más se escucha es el trístemente célebre “Ya me cansé” con que el procurador de la nación suspendió una rueda de prensa sobre los estudiantes asesinados. El hashtag de #Yamecanse, ha servido para denunciar desde la violencia a la corrupción.

La noticia ya ha socavado la imagen internacional de México. La revista Forbes redujo el rango de la imagen Peña Nieto como líder mundial. Periódicos como New York TimesLe MondeThe Guardian han dado amplia cobertura al tema

Entre las voces, el llamado a que el mismo presidente Enrique Peña Nieto renuncia cobra más fuerza.

mx_jornada.750Al mismo tiempo, el presidente Enrique Peña Nieto, desoyendo los llamados de amplios sectores, se ha marchado para el Oriente. Según La Jornada de México, “Senadores y diputados de PRD, PT y PAN pidieron ayer al presidente Enrique Peña Nieto que revalore la decisión de viajar al extranjero, ya que se requiere que permanezca en el país ante la situación de emergencia que se vive por los hechos de Iguala. El Presidente partió este domingo a las 02:00 horas. En tanto, legisladores del PRI consideraron que la visita a China y Australia es un acto de responsabilidad diplomática y de salvaguarda del interés económico de México.

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