El caso de Ethan Couch, el adolescente que mató a cuatro mientras conducía altamente intoxicado en Texas, acaparó titulares por la defensa de sus abogados, que aludieron a la “affluenza” como causante de su irresponsable conducta.
(“Affluenza” es un presunto “trastorno” que afecta a los muy ricos que, al ser aislados del mundo por sus riquezas heredadas, no comprenden de pleno las consecuencias de sus acciones).
Ayer, informa una nota de la Associated Press, la juez Jean Boyd compró el argumento de la defensa y ha condenado a Ethan a pasar algún tiempo en un centro de rehabilitación en Newport Beach, California, que cuesta US$450,000 al año, suma que los padres del joven pagarán.
También sufrirá los rigores de la libertad probatoria por 10 años.
Cuando fue detenido tras el accidente en que fallecieron cuatro personas y otras dos quedaron seriamente lesionadas, mostraba niveles de alcohol tres veces superiores al límite de la ley, igual que rastros de valium, dice la Associated Press.
Foto: Breanna Mitchell, Hollie Boyles, Shelby Bolyles y Brian Jennings muertos por Ethan Couch
