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Joe Biden hereda de su predecesor una de las peores economías en tiempos recientes. Informa Chron que 900, 000 personas adicionales presentaron nuevas solicitudes de desempleo durante la última del presidente Donald Trump en el cargo, una instantánea de los importantes desafíos del mercado laboral que enfrenta el presidente Joe Biden. 

Unas 423.000 personas adicionales en 47 estados presentaron nuevas solicitudes de asistencia por desempleo pandémico, el programa creado para ayudar a los trabajadores autónomos y de la economía informal.

Casi 16 millones de personas reclamaban beneficios al 2 de enero, la última semana en que hay datos disponibles sobre los beneficio de desempleo en EUA. 

Debido a la urgencia, el presidente optará por usar el poder ejecutivo: Una cura temporal que no podrá detener el desangre, pero al menos brindará un alivio inmediato a las familias en dificultades sin esperar al Congreso.

 Axios: “Estas acciones no son un sustituto del alivio o reforma legislativa integral que está en el plan de rescate estadounidense”, dijo Brian Deese, director del Consejo Económico Nacional. “Pero proporcionarán un salvavidas fundamental para millones de familias estadounidenses”.

La semana pasada, Biden pidió al Congreso que considerara un paquete de ayuda COVID de US$1.9 billones para abordar los impactos económicos y de salud del coronavirus.

Además de US$140 mil millones en inversiones en salud pública, Biden pidió que se envíen directamente a los estadounidenses estipendios de US$1,400 por persona. A fines de diciembre, habían recibido US$600.

Muy probablemente, el precio general del paquete se reducirá en el Congreso, donde Biden deberá reunir 60 votos en el Senado para aprobar un proyecto de ley rápidamente. En este momento, con el senado en manos de los demócratas únicamente por el voto de la Vicepresidente Kamala Harris, es díficil para el presidente obtener esta mayoría.

Entre las medidas que propone Biden, se incluye la suspensión de cobro de deudas a los veteranos. Ello podría beneficiar a millones.

Biden también buscan exigir a los contratistas federales que paguen un salario mínimo de US$15 y ausencias con paga en casos de emergencia.

Pero Biden necesitará una acción del Congreso para obtener los billones de dólares que, según sus economistas, son necesarios para impulsar sus proyectos.

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