Incapaz por seis semanas de parar el flujo de petróleo en el fondo del Golfo de México, BP intentará nuevamente tapando el pozo con una cúpula, informa Clifford Krauss en el New York Times

Indica que “Hace tres semanas se realizó un intento similar, pero ahora los funcionarios de BP dicen haber resuelto algunas dificultades técnicas que les obligaron a abortar el intento la última vez”.

Dada la racha de mala suerte que ha tenido BP, no está garantizado el éxito, dice. Pero si funciona, la cúpula podría capturar la mayoría del petróleo, el cual a través de mangueras lo recogerían barcos tanqueros en la superficie.

Aún así, de funcionar, esto no lograría detener la fuga. Una solución permanente puede estar a meses de distancia, agrega, “Una vez que los ingenieros terminen de taladrar un pozo de alivio, el cual les ayudaría a sellar con cemento la fuga”.

Desde el lunes, robots submarinos, manejando cables afilados con diamantes industriales, comenzaron a cortar el tubo por donde fluye el petróleo, para colocar la cúpula sobre el preventor de escapes, que no funcionó al explotar la plataforma el 20 de abril pasado, matando 11 trabajadores y desencadenando la peor crisis ecológica en la historia de EUA.

[Informó también el Times que el gobierno está comenzando una investigación criminal sobre el desastre].

¿Qué pasa si no funciona la cúpula?  Según Krauss, “El fracaso significaría continuar el daño ambiental y económico a la región del golfo, además de mayor presión pública sobre BP y la administración Obama, quedándoles pocas opciones para intentar controlar el escape en ningún momento próximo”.

Artículo en inglés

Foto cortesía de Mike Licht NotionsCapital via flickr