Desde Martha’s Vineyard, donde se encuentra de veraneo, golf y cocteles, el presidente Obama denunció enérgicamente la reciente ola de violencia en Egipto contra los seguidores de Mohamed Morsi, que hasta la más reciente cuenta había matado a 525 personas y herido al menos a 3700 más.
Sin embargo, calificó la situación como “compleja”.
Igualmente, anunció la cancelación de las maniobras militares programadas con el ejército al que proporciona US$1.3 mil millones en ayuda militar cada año.
“Aunque queremos mantener nuestra relación con Egipto, nuestra cooperación tradicional no puede continuar como de costumbre cuando se mata a civiles en las calles y los derechos están siendo violados”.
No obstante sus fuertes críticas a la represión contra civiles, el presidente dijo que EUA no estaba tomando partido en la lucha por el poder.
“Estados Unidos no puede determinar el futuro de Egipto. Esa es una tarea para el pueblo egipcio”.
Transcripto en inglés de palabras del presidente
Imagen: Portada The Huffington Post
