En cuatro años, la administración Obama ha deportado igual número de indocumentados de los que deportó en ocho la administración Bush y activistas pro derechos de inmigrantes consideran que es una política cínica y cruel, la cual separa las familias y se han comprometido a seguir luchando contra ella.
Escribe Michael D. Shear en el New York Times que para fines de este año se llegarían a dos millones de deportaciones de EUA durante la presidencia de Obama — casi el mismo número que entre 1892 y 1997.
“Este esfuerzo ayuda a Obama a decir que ha sido duro con la inmigración ilegal, dándole credibilidad adicional con los conservadores para lo que él llama una reestructuración del sistema para el verano”.
Pero los activistas pro derechos de inmigrantes no aceptan esa política, dice el Times.
Comenta un líder del grupo de acción cristiana Sojourners: “Si usted está separando familias por razones políticas, vamos a denunciarlo”.
Según el Times, la administración Obama ha dicho repetidamente que deportan únicamente a los criminales.
Matthew Chandler, del Departamento de Seguridad Nacional, dijo que , “Nos enfocamos en medidas inteligentes, efectivas que dan prioridad a retirar extranjeros criminales, gente que recién cruzó y violadores constantes de la ley de inmigración”.
Sin embargo, señala el Times, un nuevo informe dice que desde el 2010 han sido deportados más de 200,000 padres de hijos estadounidenses.
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