Por años se le consideró un episodio vergonzoso en la historia de EUA y durante su campaña del 2008 el entonces candidato Barack Obama se comprometió a cerrarlo. Hoy día, poco ha pasado en el Centro de Detención de Guantánamo y todo indica que nada va a pasar.
Mucho menos cerrarse.
Ryan J. Reilly publica en The Huffington Post una extensa nota sobre lo que fuera una promesa clave de la primera campaña presidencial de Obama, la cual no solo permanece incumplida sino que ha sido básicamente olvidada por el público en general y los medios de comunicación en particular.
De un tope de 684 en el año 2003, dice, en la actualidad se encuentran detenidos en Guantánamo 166 presuntos terroristas. “Efectivamente prohibidos de ser transferidos a EUA continentales por el congreso, desheredados por su propios países y rechazados de casi cualquier parte: no tienen ningún sitio a donde ir”.
Por lo tanto permanecerán allí indefinidamente, dice.
Entre los reos actuales, explica HuffPost, siete enfrentan cargos criminales — entre ellos Khalid Sheikh Muhammad y otros cuatro presuntos responsables por los ataques terroristas del 11 de septiembre del 2001.
Otros 24 podrían ser juzgados; tres han sido condenados por tribunales militares, uno ha sido sentenciado a prisión perpetua, otro podría ser liberado próximamente y otro más no será sentenciado sino hasta dentro de cuatro años.
Otros 86, dice HuffPost, han sido designados para liberación, algo que no se ha realizado. Entre ellos, 30 son de Yemen, a donde EUA se niega a enviarlos siempre y cuando la nación siga siendo un centro de terrorismo. Ningún otro país está dispuesto a aceptarlos, dice.
Un grupo de trabajo del presidente llamado la Guantanamo Task Force ha determinado que 46 entre ellos son “demasiado peligrosos para ser transferidos pero no factibles para ser enjuiciados”.
Y entonces se quedan ahí atrapados en un limbo, dice HuffPost.
De vez en cuando Obama reitera su intención de cerrar el centro de detención. “Pero la presión del público a que lo haga ha básicamente muerto en la medida que las crónicas de abuso a manos de los interrogadores de la CIA se desvanecen en el pasado y los medios cambian su enfoque a otros frentes de la guerra contra el terror, tales como el programa de drones de la administración”.
HuffPost recuerda cómo la Casa Blanca se había comprometido ante el mundo a probar que EUA podía protegerse del terrorismo sin sacrificar el compromiso con la libertad.
“En los oscuros corredores de Abu Ghraib y las celdas de Guantánamo hemos comprometido nuestros valores más preciosos”, dijo Obama en un discurso en agosto 1 del 2007. Luego, en enero del 2009 poco después de asumir su cargo, Obama rodeado de almirantes y generales emitió la orden de cerrar el campo de prisioneros durante el próximo año.
Pero eso fue hace ya mucho tiempo.
Foto: portada The Huffington Post
