Los resultados de un nuevo estudio sobre el tratamiento de la diabetes juvenil podría dar esperanza a millones de padres que despiertan varias veces en la noche para asegurar que los niveles de azúcar en la sangre de sus hijos no hayan caído a la zona de peligro, informa Natasha Singer en el New York Times.

El estudio indica que un novedoso algoritmo computarizado que analiza los niveles de glucosa en los niños y recomienda ajustes frecuentes en las dosis de insulina es más eficiente en prevenir los bajones de glucosa durante la noche que el sistema actual, en que dependen unos tres millones de pacientes con diabetes de Tipo 1 en los Estados Unidos.

Ninguno de los niños del estudio que recibieron el tratamiento mediante el sistema computarizado sufrieron bajones serios en sus niveles de glucosa durante la noche.

El estudio podría llevar a la creación de un sistema integrado artificial llamado un “pancreas artificial” que imitaría un pancreas saludable monitoreando la glucosa y administrando la dosis correcta de insulina en el momento debido, dice el Times.

Dicho sistema podría ser totalmente portátil y del tamaño de un teléfono móvil.

Artículo completo en inglés.