El Espectador.com publicó el 25 de septiembre una nota sobre la cita del empresario colombiano Santiago Uribe Velez para una indagatoria sobre sus presuntos vínculos con los grupos paramilitares que se expandieron por el territorio de Colombia durante el tiempo en que su hermano, Alvaro Uribe, era gobernador del departamento de Antioquía, que antecedió a su presidencia. Este es un tema que la periodista colombiana Olga Behar ha investigado ampliamente, publicado en el libro, ““El Clan de los Doce Apóstoles“.
Olga Behar muy amablemente respondió por correo electrónico a las siguientes tres preguntas de El Molino Online.
El Molino: ¿Qué significa la indagatoria del hermano del expresidente Uribe sobre sus vínculos con los paramilitares. ¿Por qué ahora y no antes?
Olga Behar: La decisión de llamar a indagatoria a Santiago Uribe tiene una implicación jurídica muy fuerte. Según la legislación colombiana, si se le hubiera llamado a “versión libre”, significaría que el Fiscal de Derechos Humanos quiere establecer, con el investigado, determinados elementos que está averiguando.
Pero se cita a INDAGATORIA cuando hay ya un procesado, sobre cuyas actuaciones, el Fiscal tiene indicios y pruebas que lo involucran con hechos delictivos ciertos y que ocurrieron.
Ese acervo probatorio es el que utilizará el Fiscal para determinar si el implicado — en este caso Santiago Uribe Vélez — efectivamente está o no involucrado y hasta dónde. Incluso, aunque no creo que suceda en esta primera citación, el interrogado podría ser detenido.
Por qué ahora y no antes. Realmente no lo sé con certeza. Pero creo que se debe a la reactivación de un proceso que lleva casi 20 años, gracias a las declaraciones de varios jefes paramilitares desmovilizados, que involucran al hermano del expresidente y, hay que reconocerlo modestamente, por mi libro El Clan de los Doce Apóstoles, que puso en blanco y negro lo sucedido en esa pequeña población de Antioquia llamada Yarumal, en donde Santiago Uribe Vélez presuntamente creó y dirigió un grupo paramilitar conocido como Los doce Apóstoles.
En el libro, tomé como punto de partida el testimonio del oficial de la Policía colombiana Juan Carlos Meneses, quien implica directamente a Santiago Uribe, presentando su versión y aportando pruebas que, aunque estaban en el expediente judicial, nunca habían sido tenidas en cuenta.
EM: Su libro gira en torno al testimonio del ex policía Menesses, que también es citado en los documentos que publicó el Espectador sobre la indagatoria a Uribe Vélez. A muy largos trazos, podría darnos una trayectoria de cómo se desenvuelve el caso hasta llegar a donde estamos?
OB: Durante los años 93 y 94, un grupo que supuestamente era de “limpieza social”, asesinó selectivamente a más de cien personas y sembró el terror entre el campesinado del norte antioqueño. El grupo paramilitar supuestamente fue creado y estaba dirigido por Santiago Uribe Vélez y auspiciado por su hermano Álvaro — quien después sería presidente de la república — y respaldado financiera e ideológicamente por una serie de hacendados y comerciantes de la región norteña de Antioquia conocida como Yarumal.
Ese grupo operó como una estructura paramilitar y, según Meneses, desde la hacienda La Carolina, de propiedad de la familia Uribe Vélez, Santiago dirigía la operatividad y proveía la financiación de ese grupo al margen de la ley.Incluso, Meneses refiere que en la hacienda existió un campo de entrenamiento militar de los integrantes de la organización.
Luego de que hubiera una exposición pública inconveniente para los fundadores, por errores que cometieron los criminales de Los Apóstoles, uno a uno fueron asesinados los integrantes, quedando apenas unos pocos, entre ellos Meneses, quien fue involucrado en varias ocasiones, pero siempre pudo librarse de la persecución judicial, según él, gracias a la intervención de los hermanos Uribe Vélez.
Nada hubiera pasado con la investigación, que es un monumento a la impunidad, de no haber sido porque luego de desmovilizados, los grandes jefes paramilitares revivieron el tema en sus declaraciones ante los jueces.
Como Meneses era uno de los que más conocía de estos asuntos, comenzó a ser perseguido y amenazado de muerte, por lo que se fue a Argentina y desde allí hizo una denuncia pública ante varios juristas de ese país, entre ellos el Premio Nobel de la Paz, Adolfo Pérez Esquivel.Luego, ratificó sus argumentos contra los Uribe Vélez, a quienes acusa de poner en peligro su vida, ante un Fiscal que lo interrogó en Buenos Aires. Esto reactivó el proceso judicial.
EM: El expresidente Uribe sigue siendo un formidable poder político en Colombia. ¿Esto cómo lo afecta a él como polo de atracción de la derecha? Cuál es el estado actual de los paramilateres, las AUC?
OB: Uribe, líder de un nuevo partido de ultra derecha, irónicamente llamado por él Centro Democrático, se ha candidatizado ahora al senado de la república.
Pienso que ésto lo va a perjudicar enormemente, porque aunque goza aún de aprecio por parte de un sector importante de la población, poco a poco ha visto cómo ciudadanos honestos se desilusionan de él, a raíz de tantos escándalos, como interceptaciones ilegales, persecución a líderes populares, protección a varios de sus exfuncionarios que huyen de la justicia y demás asuntos ilegales e inmorales que sucedieron durante sus ocho años de gobierno.
Creo que si Santiago es encarcelado, eso lo afectará no solo en lo emocional, sino que también habrá implicaciones jurídicas para él, pues ha sido mencionado como quien auspició las supuestas actuaciones criminales de su hermano.
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