Podría decirse que la paranoia reina en Egipto después del derrocamiento del presidente Mohamed Morsi (quien será juzgado próximamente) y la represión que vino después.
El viernes pasado, informa Taylor Berman en Gawker, las autoridades arrestaron a una cigüeña bajo sospechas de espionaje.
Sucedió en Qena, a unas 280 millas (450 km) de El Cairo.
Un vecino vio un ave con un dispositivo en un ala y, creyendo que podría ser espionaje, la capturó y entregó a las autoridades.
Un veterinario traído desde lejos explicó que se trataba de un dispositivo de rastreo de la vida silvestre para estudiar las migraciones de las aves.
Aún así, el jefe de seguridad de Qena ha dicho que el delator del pájaro es un héroe.
En cuanto a la pobre cigüeña, señala Gawker, que el domingo todavía seguía presa porque liberarla requería orden de la fiscalía.
Foto: Wikipedia
