“Quería tener relaciones sexuales, incluso después de que termináramos”, dijo una.
“Antes teníamos sexo una vez a la semana ahora son cinco”, dijo otra.
Son estos, según escribe Daniel Bergner en una extensa nota en el New York Times, algunos comentarios de las participantes en las pruebas de un nuevo farmaco que podría ser la versión femenina del viagra y que en el 2016 podría llegar a los botiquines de las parejas en que las mujeres sufren del transtorno Hypoactive Sexual Desire Disorder (en español Anafrodisia), que es una pérdida sin explicación médica aparente del deseo sexual femenino, que podría afectar hasta el 30% de las mujeres de entre 20 y 60 años.
Los productores de Lybrido y Lybridos solicitarán este verano aprobación de la Administración de Drogas y Alimentos de EUA (FDA por sus siglas en inglés) y llegaría al mercado para el 2016 y pronto a los botiquines de las parejas en que se apagó el fuego.
Funciona de manera diferente al Viagra, dice el Times. El uno”causa cambios físicos que permiten que el pene se levante”; el otro, “Afecta las regiones primitivas y ejecutivas del cerebro. Alcanzaría en la psique.
En ambos casos se liberan dos sustancias químicas activas para aumentar el dominio de la dopamina — un neurotransmisor que impulsa las ganas — sobre la serotonina.
Las pruebas han sido positivas hasta el momento.
