Vladimir Putin ha dejado claro que hará todo lo posible por impedir que Ucrania se acerque más a la esfera de influencia de las naciones occidentales.
El miércoles, el Kremlin anunció que, en vista de los US$16 mil millones que Ucrania debe a Rusia por concepto de suministros de energía y otros préstamos, se verían obligados a pedir que paguen por adelantado, informa David M. Herszenhorn en el New York Times.
Dijo el primer ministro Dmitri A. Medvedev al concluir en una junta de gobierno: “Si continúa esta situación crítica, existirán todas las razones para realizar una transición a un sistema de prepago por los suministros de gas”.
Según el Times, Putin dijo estar de acuerdo pero pidió que se dilatara tal medida dados “los problemas que enfrenta Ucrania”.
Señala el Times que Rusia podría causar serios problemas en Ucrania si fuera a cortar el suministro de gas.
Con las elecciones programadas para el 25 de mayo para buscar un reemplazo a Viktor F. Yanukovych, derrocado en febrero y quien huyó del país, ningún candidato pro ruso se ha presentado, por lo cual el Kremlin busca otros medios de mantener su influencia en una región que por siglos ha controlado.
