No obstante el veto inicial del gobernador, la legislatura de Nebraska abolió la pena de muerte el miércoles, con lo que se une a 18 otros estados de la Unión Americana y el Distrito de Columbia que la consideran un castigo inhumano.
Pete Ricketts, republicano gobernador del conservador estado, vio su veto anulado por un voto de 39-10 en la única cámara del congreso estatal. El gobernador había realizado un gran esfuerzo de cabildeo por impedir que los legisladores votaran en contra de él.
“No tengo palabras para expresar lo horrorizado que he quedado luego de haber perdido una herramienta crítica para proteger a las fuerzas del orden y las familias de Nebraska”, dijo Ricketts en una declaración después de la votación.
Un legislador que junto con el gobernador intentó mantener la medida en el código penal del estado anunció la formación de Nebraskans for Justice, un grupo que explorará una iniciativa electoral ciudadana para reinstaurar la pena de muerte.
El reportero de Omaha.com describió la situación como tensa mientras se llevaba a cabo el voto.
Luego, la sala irrumpió en aplausos especialmente para Ernie Chambers, quien durante 40 años ha luchado contra la medida.
Nebraska es el primer estado de tradición conservadora en abolir la pena de muerte desde 1973 cuando Dakota del Norte lo hizo.
Foto cortesía de Tommy Woodard via flickr