NEW YORK, NEW YORK. Especial para el Molino. Los que trabajamos en la agencia publicitaria The Bravo Group en esta ciudad hace algo más de una década, recordaremos con nostalgia, cariño y una buena carcajada el incidente que llegó a conocerse como la crisis de hamburguesa. (En inglés “Hamburger Attack”).
Un día pasó algo lo que siempre pasa en las agencias de publicidad: al cliente principal no le gustó nada de lo que habíamos presentado y fue preciso comenzar desde cero. Hubo que preparar de nuevo todas las campañas, radio, televisión, impresos, correo directo. Hacerlo en menos de 24 horas. Y hacerlo regañados.
La encargada de coordinar el trabajo, cuyo nombre todos recordamos, era una señora algo mayor y definitivamente pasada de libras. Aquél día de verano neoyorkino, en que el calor infernal y la tensión se sentían por toda la oficina, mientras corríamos de un lado al otro botando corriente, buscando ideas, ella decidió pedir su almuerzo. Una hamburguesa enorme, la cual llenó de salsa de tomate y otros aderezos.
Y fue en la oficina de este bloguero a donde llegó, sudando a chorros, muy agitada hasta con taquicardia, presa de la desesperación, al borde del llanto y dice. “¿No ve?” “¿No veo qué? señora”. “¡No ve que no me siento bien!” Procede a desvanecerse, aferrándose a su hamburguesa a medio morder, la cual veía tal cual un náufrago ve un salvavidas. Por su mano escurría la salsa de tomate, el jugo de la carne, cebolla picada.
A la señora la sacamos en la silla donde se había sentado, llamamos a los paramédicos, le dieron sales, un calmante, agua, le pusieron hielo en la cabeza. Y quedó la siempre la expresión, cuando las cosas se ponían tensas, enfrentábamos una Crisis de Hamburguesa.
El anuncio que publicamos aquí nos recordó de nuestra querida amiga, de la cual esperamos se encuentre bien de salud, jubilada en el sur. (Lamentablemente para ella, jamás supo que había sido la protagonista del incidente, aunque de vez en cuando ella misma al ponerse la situación difícil decía que vivíamos una Crisis de Hamburguesa).
