Colombia Venezuela
Colombianos, temerosos de ser deportados y maltratados por el gobierno de Venezuela, cruzan la frontera de regreso a su país. Imagen cortesía notitarde.

… o como dicen por ahí al César lo que es del César y Adiós que te vaya bien

Juan Manuel UrrutiaAnte los embates demenciales del maduro, el Gobierno de Colombia ha hecho muchas cosas bien.

La primera de todas ha sido el tono sereno. Un contrapunteo verbal con orates como el maduro y el dado que insulta el nombre de Dios cada vez que abre la boca no aportará nunca nada. En cambio les dará una plataforma para evitar confrontar el desastre al que han llevado a Venezuela.

El desastre natural causado por el fenómeno de la niña en los años 2010 y 2011 llevó a un replanteamiento de la atención de emergencias.

Se articuló una visión de gestión del riesgo y se organizó una Unidad para tal efecto.

La Unidad funciona y bien. Colombia ha logrado ofrecer algo de comprensión, de apoyo y de atención a las víctimas del desastre causado por el maduro.

El Presidente Santos ha ido apretando el discurso sin entrar en tonos vociferantes ni insultantes. Mientras tanto el par de locos empeñados en acabar con Venezuela y seguir enriqueciéndose con sus compinches narcotraficantes y terroristas, arrecian insultos, improperios y falsas acusaciones.

El maduro ha cogido la costumbre de decir “tengo pruebas y las voy a mostrar” creyendo que la gente le cree. Nunca las ha mostrado.

Haber logrado que en medio de su locura las autoridades venezolanas hayan autorizado que los niños que estudian en Cúcuta pudieran volver al colegio era una obligación.

Eso le salió bien al presidente y la ministra de educación se lució.

Falló, en cambio la canciller

Ha estado un paso atrás del maduro. La derrota en la OEA mostró que nuestra diplomacia no estaba preparada para llevar el asunto. La reunión con la canciller venezolana en Cartagena fue un fracaso total.

En medio de la crisis ha habido mucha estupidez.

Estúpidos quienes claman por una confrontación frontal

Estúpidos quienes le piden peras al olmo, pidiéndole dignidad al bojote, pierden el tiempo, él se le vendió a los narcos y le quedó gustando.

Estúpido mi glorioso partido conservador que resuelve pescar en río revuelto y llama a un debate para promover una moción de censura contra la canciller.

El maduro y el dado que insulta el nombre de Dios mantendrán la crisis viva.

De todas las fórmulas muchas muy estúpidas que se plantean a diario, se me ocurre que lo que sí es indispensable es sacar a Venezuela de los diálogos de La Habana. Si el proceso va tan bien como nos han dicho, para qué carajos necesitamos como garante a un gobierno que no es capaz de garantizar tan siquiera el suministro de papel higiénico a su población.

En todo lo demás, me parece acertado lo que se está haciendo.

Colombia tiene voto y VETO en Unasur.

No vale la pena salirse dando un portazo. De pronto quitarle el respaldo al bojote, por vende patrias a ver si por lo menos se queda sin el sueldito que le pagan y para que quede claro que ese señor a nosotros no nos representa.

De resto como cuando uno baja por una trocha complicada montado en un caballo, apretar las piernas, ajustar la rienda y andar despacito.

Los maduros se pudren solitos y chau. Pero la caída será estruendosa, para eso sí que tenemos que estar preparados.