newsLes tengo dos noticias.

Una buena:

Reflexiones de Juan Manuel UrrutiaYo pensaba que la subcomisión de género de la mesa de La Habana era uno de esos comités que se crean para que parezca que se le está poniendo atención a un tema determinado. ¡Resulta que no!

Yo no había leído con cuidado las conclusiones de esa comisión. El titular inicial anunciaba que se había establecido que los asuntos de género tendrían prioridad en la implementación de los acuerdos. Bien, pero medio obvio.

La buena noticia es que se ha determinado que los crímenes de lesa humanidad cometidos contra las mujeres y las comunidades LGTBI no tendrán amnistía.

¡Buena noticia! Sin duda.

Una gran preocupación que he compartido con algunos amigos es que había un esfuerzo soterrado por borrar del prontuario de los comandantes de las FARC el historial de explotación y de violencia sexual a que sometieron a miles de niñas, y niños, de las comunidades en las zonas bajo su “control” militar y social.

Desde 1999, en mi primera entrevista con una excombatiente, reclutada forzosamente a los 12 años por las FARC, con muchísima frecuencia registré los abusos a que eran sometidas estas niñas, y niños repito. Los comandantes tenían derecho de pernada, estrenaban a las niñitas y a algunos niñitos, eso siempre fue una violación y en los casos en que la víctima “quería estar con el comandante” se constituía el delito de abuso sexual y acceso carnal a menor de edad.

Luego cuando se cansaban o cuando aparecía otra niñita, o niñito, más apetecible, desechaban a la “socia” que para sobrevivir a los horrores de la guerra se convertía en la novia de la tropa.

Algunas tenían suerte, se enamoraban, conseguían pareja, embarazo y aborto forzado.

La fiscalía, algo bueno tenía que pasar a espaldas de Montealegre seguramente ocupado en la defensa de Palacino o en entender los algoritmos de la doctora Springer, ha logrado consolidar un informe que detalla 232 casos de violencia sexual.

Las historias son tenebrosas y muchas:

Que se haya acordado que esos delitos no serán “amnistiables” significa que sus perpetradores tendrán que ir al tribunal especial de justicia transicional a confesar.

Y significa que quienes creemos que la paz se construye con la verdad y el perdón estaremos pendientes para que lo que no es perdonable no sea perdonado y que a quienes no cuenten la verdad les caiga todo el peso de la ley.

A mí me queda un pendiente ¿y los niños? Les quedó faltando el centavo para llegar al peso.

Y una muy mala:

Mientras la canciller y doña Piedad Córdoba asistían entusiasmadas a la presentación de las conclusiones de la subcomisión en La Habana, en Colombia la flamante ministra de educación sembraba arbolitos en el centro experimental Gaviotas, lo más lejos posible de La Guajira en donde los niños y niñas se siguen muriendo de hambre y los políticos siguen haciendo hochas y panochas con los recursos del PAE que se supone ella debe vigilar.

http://www.elheraldo.co/desnutricion-en-la-guajira

http://extranoticias.com.co/sitio/contraloria-cierra-investigacion-en-pae-de-la-guajira-con-hallazgos-por-16-792-millones/

¿Cuándo va a responder la ministra?

¿Seguirá diciendo que la paz se construye sembrando arbolitos?

¿Seguirá promocionando campos de verano?

PD: Quedó oficialmente definido; Hillary contra el Peluquín, ¡pobres los gringos!

desnutricion