niños_guerrilla_colombiaLa Habana, Cuba, 2 de septiembre de 2016

El Gobierno Nacional y las FARC-EP comunican a la opinión pública que el próximo 10 de septiembre se iniciará el proceso de salida de campamentos de las FARC-EP de los menores de edad que se encuentren en estos, todo ello en desarrollo del acuerdo adoptado en la Mesa de Conversaciones el pasado día 15 de mayo de 2016.

La recepción de los menores de edad se efectuará por el Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF), que trasladará a los menores a los centros de acogida temporal en los que residirán hasta que las instituciones competentes decidan los lugares en los que se procederá a realizar el proceso de reincorporación e inclusión social.

Todas las fases de este proceso se realizarán con estricta observancia del interés superior del niño, niña y adolescente.
Reflexiones de Juan Manuel UrrutiaAsí no más pretenden cerrar un tema que ha ocupado a quienes algo tenemos que ver con los derechos de niños y niñas durante los últimos 20 años.

Averiguando un poco más descubre uno que el comunicado arriba citado dice varias cosas que configuran un monstruoso engaño:

La ley colombiana tiene una institución llamada el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar que desde por lo menos hace 17 años ha venido implementando muy exitosamente programas de atención a niños y niñas desmovilizados.

¿Por qué diablos el gobierno colombiano acepta que le “entreguen” los niños a UNICEF?

El alto comisionado para la paz en entrevista en Blu Radio hoy en la mañana deja entrever que el gobierno aceptó la tesis de las FARC de que para ellos los menores de edad son los menores de 15 años, sacando así, de un plumazo, a todos los que tienen entre 15 y dieciocho años, y lo que es peor a todos los que fueron reclutados y utilizados cuando tenían menos de 15 años, pero que los cumplieron estando ya retenidos por las FARC. El reclutamiento de menores de 18 años de edad y su utilización como trabajadores no remunerados, (esclavos), combatientes, mensajeros, sujetos de explotación sexual y otros vejámenes es un delito de lesa humanidad.

Desde hace dos años, por lo menos, se le viene pidiendo a los negociadores de ambas partes que establezcan un acuerdo para que TODOS los niños y niñas en sus filas sean liberados y puedan ser atendidos por las instituciones del Estado en su proceso de reincorporación.

¿Le vamos a creer a las FARC que tan sólo eran los pocos que están hoy en sus campamentos?

¿Qué pasó con todos los demás, los “desmovilizaron” por debajo de la mesa?

Al minimizar el tema con una entrega simbólica de un pequeño grupo de niños menores de 15 años, con comunicado protocolo y toda la carreta; el Gobierno y las FARC han acordado barrer debajo del tapete los miles de casos de niños y niñas explotados por las FARC.

Parecería entonces que Gobierno y FARC han acordado esconder a los niños para alivianarle la carga a sus explotadores. Mal empezamos con la justicia transicional si de antemano montamos una patraña para engañar a quienes esperamos la verdad, la reparación y la no repetición.