La apertura de EUA hacia Cuba, según el senador republicano por la Florida Marco Rubio, “forma parte de la larga historia de acomodar dictadores y tiranos que ha establecido esta administración”.
Sus declaraciones a Fox News, según escriben Katie Gluck y Seung Min Kim de POLITICO, fueron repetidas con breves variaciones en múltiples entrevistas con los medios.
Abrir una embajada en La Habana es parte “del curso de la administración de otorgar unilateralmente concesiones … sin recibir nada a cambio”, señaló.
A Rubio se le considera “presidenciable” para su partido.
Por su parte, Jeb Bush, ex gobernador de la Florida y quien anunció ayer sus intenciones de postularse como candidato republicano a la presidencia en el 2016, dijo que era otro de los muchos errores sobre política exterior cometidos por la administración.
El gobernador de la Florida, Rick Scott, también se pronunció en contra, igual que han hecho el congresista Mario Diaz-Balart y el Senador Lindsey Graham de Carolina del Sur, quien además se comprometió a bloquear cualquier medida que conduzca a la normalización de relaciones.
Sin embargo, dice POLITICO, comienzan a verse fisuras en la unidad republicana sobre el tema.
El Senador Jeff Flake, republicano por Arizona y quien formó parte de la delegación estadounidense que trajo al contratista Alan Gross de regreso a EUA, lo ve con buenos ojos, igual que la Cámara de Comercio de EUA, cuyo presidente Thomas J. Donohue ha emitido un comunicado que dice:
“Creemos firmemente que un diálogo abierto y un intercambio comercial entre EUA y los sectores privados de Cuba traerán beneficios mutuos […]”.
Mientras tanto, en Miami, baluarte de la ultra derecha cubano, exiliados cubanos se manifestaron contra la apertura.
Artículo en inglés POLITICO
