Muerto Chita, el chimpancé que acompañó fielmente a Tarzán, divulgamos el secreto de su doble identidad: era macho.
Su nombre en inglés era Cheetah: pero en español, al bautizársele Chita, cambió de género, convirtiéndose en una mona.
Esta doble identidad no pareció afectar ni a Chita ni a Tarzán ni nadie.
Chita sobrevivió al actor y campeón olímpico de natación Johnny Weissmuller (QED 1984– “Yo Tarzán”), su dueño y a Maureen O’Sullivan (QED 1998 — Jane”).
Chita alcanzó los 80 años, lo cual le ganó un espacio en el libro Guinness de Récords Mundiales como el primate no humano más viejo.
La estrella de Hollywood en blanco y negro se había jubilado en Palm Harbour, en la Florida, en un santuario para primates, indicó en un obituario MSNBC.
Dicen que en su vejez no siempre anduvo de buen genio y a veces se enojaba y lanzaba manotadas de excremento a la gente.
Pero otras veces se portaba como un chimpancé juicioso.
Las aventuras de Tarzán fueron la creación del autor estadounidense Edgar Rice Burroughs.
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