Matt Cherette de Gawker nos trae lo que es una nueva definición de una requisa policial.
Una cámara de vigilancia pescó un agente de la policía estatal uniformado usando el capó de un auto como colchón (o al menos un sitio donde poder tener relaciones sexuales).
El video lo muestra con los pantalones de su uniforme por las rodillas mientras una mujer está en el capó.
Dice Gawker que hasta el momento no han despedido al agente, pero que está siendo investigado. “Investigación interna”.
Por su parte, la página de KBO.com dice que el agente fue nombrado el año pasado agente del año y había formado parte de la escolta del antiguo gobernador del estado.
¡Cachado con las manos (por así decirlo) en la masa!
