Bueno, el cocodrilo todavía era joven, es decir no había crecido completamente.
Tampoco hubo lesiones.
Pero aún así, no sorprendería a nadie que el empleado de Australian Air Express que lo encontró en la barriga del avión entre Brisbane y Melbourne haya necesitado cambiar de calzoncillos.
Las autoridades no saben cómo se escapó el reptil.
Dice una declaración de Qantas: “El animal fue controlado rápidamente sin peligro, una vez llegó el avión a Melbourne. Ahora la investigación intenta establecer si se cargó adecuadamente al llegar a Australian Air Express”.
¡Tremendo susto!
Gracias: MetroWeb Reporter
