Oficialmente se dice que el General John Allen no aceptó el comando supremo de la OTAN y optó por retirarse del ejército para acompañar a su esposa enferma.
Esa es la versión oficial, la cual vino acompañada con agradecimiento presidencial por su servicio, que incluyó 18 meses en Afganistán.
Oficialmente se dice que no tiene nada que con un escándalo de faldas que se desprende de aquél donde cayó David Petraeus, ex director de la CIA.
Ahora bien no hay que culpar a nadie si algunas mentes mal pensadas creen que tuvo algo — no mucho algo únicamente — que ver con la voluminosa correspondencia (30,000 cartas) con Jill Kelley, jugadora clave en la caída de Petraeus,
Después de todo para un general de cuatro estrellas llegar a ser el mandamás de la OTAN es algo altamente cotizado.
En fin la noticia es que John Allen es ahora un ex-general del ejército de EUA.
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